sábado, 23 de mayo de 2015

Los sentidos y la neuro evolución

A lo largo de nuestra historia, el ser humano ha forjado con sus acciones el proceso natural de  la evolución, ese deseo constante en querer ser mejor y destacar sobre otros. Para ello, nos hemos reinventado tanto en nuestra conducta como en la manera en que logramos todo lo que nos proponemos, valiéndonos de diferentes estrategias  o técnicas para  alcanzar dichas metas.

En Europa, durante el siglo XVII se afirmó que la razón era la fuente de nuestros conocimientos, siendo personajes destacados como Descartes, Spinoza y Leibniz, quienes ofrecieron distintas versiones del modo en que la razón fundamenta el conocimiento, así como de su relación con la experiencia.Habitualmente se considerabaque la experiencia eraprimordial. Sin embargo, las personas han probado que lo racional se pierde cuando se entra en contacto con nuestros sentidos, y es aquí donde nos detenemos ante el concepto filósofico de Platón, quien apoyándose en esta premisa, nos explicaba que la realidad que los seres humanos percibimos a través de los sentidos – vista, tacto, olfato, etc. – es solo un pálido y distante reflejo de un único y verdadero mundo perfecto, ideal, abstracto, el mundo de las ideas, en el cual se encuentran los modelos perfectos de todo aquello que nos rodea y que solo es perceptible por el alma, la cual tiene la ventaja de no estar contaminada ni distraída por los sentidos. 

Fiel a este estilo, se crearon  métodos y técnicas para recolectar información basada en los sentimientos y como ellos influyen sobre la toma de decisiones de una persona, quien puede en muchas ocasiones, sucumbir ante sus deseos más bajos sin ser consciente de porqué llegó a esa instancia. 

Lo cierto esque en pleno siglo XXI, ante una necesidad inminente de posicionarse para la preferencia de un producto o marca,  muchas empresas en todo el mundo están desarrollando estudios para conocer más sobre las reacciones que producen ciertos estímulos sobre potenciales consumidores.Fritolay descubrió, con sus estudios basados en un sistema de resonancia magnética, que los colores brillantes activan la zona de culpa del cerebro en las mujeres y que son asociados a factores poco saludables. Eso los llevó a bajar el brillo de sus empaques y las ventas se incrementaron 30% en tan solo un mes. Daimler-Chrysler Inglaterra identificó, también con resonancia magnética funcional, que las áreas del cerebro que se activan cuando se mira al Mini Cooper son las mismas que se estimulan cuando se observa a un bebé. Por el contrario, los carros deportivos están más asociados a las zonas de gratificación inmediata, al sexo y a las compras compulsivas.Se miden variables como el ritmo de la respiración, la respuesta cardíaca, el estado de las pupilas y las zonas del cerebro que se activan (de placer, rechazo, simpatía y demás) ante determinadas situaciones.

De esa forma, se determina qué tanto le agrada o no el producto al consumidor, más allá de lo que opine verbalmente.Conociendo mejor al consumidor, se pueden diseñar campañas de publicidad y comunicación, con mayor probabilidad de éxito en la comercialización.

Esto significa que actuamos más con base en sentimientos, que guiados por argumentos lógicos, aunque a veces nos parezca lo contrario. Sin darnos cuenta, elegimos un producto simplemente porque nos gusta o nos enamora, y es recién luego cuando buscamos argumentos racionales. Decimos, por ejemplo, que compramos un carro último modelo porque es de buena calidad y estaba a buen precio, pero en el fondo lo hicimos porque nos encanta la velocidad y nos seducen los modelos deportivos.  Es así como la ciencia  identifica los sentimientos y las reacciones fisiológicas de la gente en relación a los productos, y no se queda solo con lo que se opina sobre estos.

Ya no es importante mostrar las cualidades de un producto o su relación precio-valor, sino enamorar al consumidor con las historias, los mensajes, las imágenes, las texturas. Si al cliente no se lo enamora, otra marca -es decir la competencia- entrará en su espectro de decisión.

Mi nombre es José Dos Santos, si quieres seguir leyendo ideas basadas en percepciones naturales y abstractas, no dejes de seguirme en mi cuenta de Twitter: @santyrox

No hay comentarios:

Publicar un comentario